FIDELIDAD A UNA PROMESA salesianos cooperadores de Málaga. Febrero 2012
LA FIDELIDAD
La fidelidad es una noción que en su nivel más abstracto implica una conexión verdadera con una fuente o fuentes. Su significado original está vinculado a la lealtad (de una persona para con un señor o un rey) y la atención al deber. La palabra "fidelidad" deriva de la palabra fidelitas (latín), y su significado es servir a Dios.
En cualquier caso, la fidelidad está relacionada por el pueblo y de manera popular por la lealtad al matrimonio. El ruido que nos rodea constantemente en nuestro caminar diario, ensordece nuestro mensaje de fidelidad a Dios, a nuestros principios como cristianos y a nuestra promesa de ser apóstoles de Dios por el mundo (en nuestro caso como Salesianos cooperadores).
De tal manera, la fidelidad es la capacidad espiritual –el poder o la virtud– de dar cumplimiento a las promesas. Prometer es una acción soberana; revela una gran soberanía de espíritu, ya que exige decidir hoy lo que se va a hacer en adelante, bajo condiciones que no se pueden prever. El que promete corre un serio riesgo porque se compromete a actuar de la forma que hoy juzga óptima en situaciones que pueden llevarle a pensar y sentir de modo distinto. El que es fiel cumple la promesa a pesar de los cambios en las ideas, las convicciones y los sentimientos, que pudiera provocar el tiempo. El que promete se adelanta al tiempo de modo lúcido y libre. El que cumple fielmente lo prometido lo hace consciente y voluntariamente. ¿Qué es lo que mueve su voluntad a mantenerse fiel? Es la decisión de crear su vida en cada instante conforme al proyecto establecido en el acto de la promesa.
También se puede decir que la fidelidad es la capacidad de no engañar, no traicionar a los demás. Es un valor moral que faculta al ser humano para cumplir con los pactos y compromisos adquiridos. La fidelidad es entonces el cumplimiento de la palabra dada..
PARA LA REFLEXIÓN Y EL DIÁLOGO
· ¿En qué momento, de qué forma sentí la llamada del Señor?
· ¿De dónde proviene el ruido, cuales son mis dificultades para ser fiel a mi vocación?
· ¿De dónde me alimento para mantener mi fidelidad?
FIELES A UN ESTILO…FIELES A DON BOSCO
DEL AGUINALDO RECTOR MAYOR 2012…
Don Pascual Chávez nos habla en el aguinaldo para la familia salesiana de una nueva imagen de Don Bosco, una renovación del lenguaje para adaptarlo al siglo en el que vivimos y un mensaje directo y de aliento para llegar a los jóvenes e irradiarlos del espíritu, del cariño y del amor de un Don Bosco en el tiempo que vivimos.
Palabras del Rector Mayor.
La imagen de Don Bosco y de su acción debe ser reconstruida seriamente, partiendo de nuestro horizonte cultural: desde la complejidad de la vida de hoy, desde la globalización, desde las dificultades de apostolado, desde la disminución de las vocaciones, desde la “puesta en cuestión” de la vida consagrada. Los cambios radicales, o epocales como los llamaba Don Egidio Viganó, nos obligan a revisar esa imagen y a pensarla nuevamente bajo otra luz, para una fidelidad que no sea repetición de fórmulas y obsequio formal a la tradición.
La importancia histórica de Don Bosco hay que localizarla, a más que en las “obras” y en algunos elementos pedagógicos relativamente originales, sobre todo en su percepción concreta y afectiva del alcance universal, teológico y social del problema de la juventud «abandonada», y en su gran capacidad de comunicarla a amplios sectores de colaboradores, de bienhechores y de admiradores.
Ser fieles a Don Bosco significa conocerlo en su historia y en la historia de su tiempo, hacer nuestras sus inspiraciones, asumir sus motivaciones y elecciones.
Ser fieles a Don Bosco y a su misión significa cultivar en nosotros un amor constante y fuerte hacia los jóvenes, en especial los más pobres.
Este amor nos lleva a responder a sus necesidades más urgentes y profundas. Como Don Bosco nos sentimos golpeados por las situaciones difíciles que ellos viven: la pobreza, el trabajo de los menores, el abuso sexual, la falta de educación y de formación profesional, el ingreso al mundo del trabajo, la poca confianza en sí mismos, el miedo ante el futuro, la pérdida del sentido de la vida.
PARA LA REFLEXIÓN Y EL DIÁLOGO
· ¿Somos hoy nosotros fieles discípulos de Don Bosco tal y como prometimos en su día?
· ¿Vivo esa fidelidad junto a mis hermanos, mi familia Salesiana y el entorno que me rodea?
· ¿Qué dificultades encuentro para ser fiel a Don Bosco y al estilo salesiano?
· ¿Conozco esa nueva imagen, ese nuevo lenguaje del que habla nuestro Rector Mayor?
En esta segunda parte del tema, se nos invita a realizar un ejercicio de evaluación personal, dediquemos unos minutos a pensar si aquello que en su día realice ante la mirada de Dios y rodeado de mis hermanos, hoy es un hecho real. El porqué de mi promesa, los altibajos en el camino, mi sentido de pertenencia, mi ofrecimiento al servicio y la fidelidad a la asociación y a mis hermanos.
LA PROMESA
En pocos meses nuestro centro nos invita a todos sus hermanos a realizar de forma libre y voluntaria la Renovación de la promesa. Es ahora el momento de pensar en ello, de hacer un análisis del camino recorrido, de sentirnos vivos o de resucitar. De limar asperezas con mis hermanos y de decir fuerte y alto que quiero seguir siendo fiel a Dios y al estilo de Don Bosco.
Para ello haremos una lectura meditada sobre la fórmula de la promesa. Es un buen momento para reanalizarla y compartir opiniones.
Oh Padre, te adoro porque eres bueno y amas a todos.
Te doy gracias porque me has creado y redimido
porque me has llamado a formar parte de tu Iglesia
y en ella me has hecho conocer a la Familia apostólica de Don Bosco,
que vive para Ti al servicio de los jóvenes y de las clases populares.
Atraído por tu Amor misericordioso,
quiero corresponder a él practicando el bien.
Por eso, después de una seria preparación,
PROMETO esforzarme por vivir el Proyecto evangélico
de la Asociación de los Salesianos Cooperadores.
Así pues, me comprometo: a ser fiel discípulo de Cristo en la Iglesia Católica;
a trabajar por tu Reino, especialmente en la promoción y salvación de los jóvenes;
a profundizar y dar testimonio del espíritu salesiano;
a colaborar, en comunión de Familia, con las iniciativas apostólicas de la Iglesia local.
Dame, Padre, la fuerza de tu Espíritu, para que sepa ser fiel a este propósito de vida. ¡María Auxiliadora, Madre de la Iglesia, me asista y me guíe!
Amén.
PARA LA REFLEXIÓN Y EL DIÁLOGO
· ¿Qué es lo que más te ha llamado la atención de la fórmula?
· ¿En que creo que puedo mejorar mi compromiso?
· ¿Tengo fuerzas para seguir el camino?
· Fiel a Dios
· Fiel a uno mismo
· Fiel con mis hermanos
· Fiel a los jóvenes y clases populares
FIELES A UNA VOCACIÓN
DEL PROYECTO DE VIDA APOSTÓLICA
Articulo 4. Una sola vocación, dos formas de vivirla.
1. Los salesianos cooperadores laicos realizan su compromiso y viven el espíritu salesiano desde su condición de vida , familia, trabajo y difunden sus valores en el propio ambiente
2. El salesiano cooperador Obispo, Sacerdote o Diácono desempeña su ministerio inspirándose en Don Bosco, modelo eminente de vida sacerdotal. En sus opciones pastorales da preferencia a los jóvenes y a las clases populares
Es en este último punto donde nos pararemos ahora, en nuestro centro de Málaga, contamos con el padre Gabriel, párroco de La santa cruz y San Felipe Neri, incansable en su misión desde hace algunos años ya (no recuerdo bien cuantos). En un ejercicio cronológico nos hará un repaso de sus diferentes etapas al servicio de Dios y del centro de salesianos Cooperadores. La experiencia puede ser muy gratificante.
Podemos acabar compartiendo experiencias de fe. De servicio a nuestra misión, es el momento de compartir!!!
Fidelidad a una promesa por Jesús Jiménez. Salesiano Cooperador y vocal de formación del centro de Málaga